Hacer llegar las mejores soluciones posibles a los clientes es la prioridad número 1 de Concentrol. Y esto implica trabajar diariamente para conseguir la máxima eficiencia en todo el proceso de producción de los productos. En esta línea, la empresa de soluciones químicas ha renovado el laboratorio de control de calidad para facilitar la tarea a los profesionales del departamento y conseguir una mejor calidad en los resultados de cada análisis.

El control de calidad es una de las funciones más vitales para una empresa, puesto que representa el conjunto de programas y acciones a fin de detectar los defectos en productos, procesos o servicios. Concentrol, a través de análisis de los varios productos y su interpretación, determina si el producto está listo para ser comercializado; es decir, preparado para resolver las demandas de los clientes y cumplir con las necesidades.

El nuevo laboratorio de control de calidad ofrece más espacio y una mejor reorganización de este. De este modo, resulta más práctico y cómodo y facilita llevar a cabo las tareas, mejorando la calidad de las medidas. Además, la mejora del espacio también ha significado la posibilidad de ampliar las herramientas de trabajo y tener aparatos por duplicado, cosa que hace crecer la productividad. Por otro lado, el nuevo laboratorio refuerza todavía más la seguridad, uno de los aspectos más esenciales. En resumen, el equipo humano del laboratorio de control de calidad valora muy positivamente este cambio, puesto que facilita el trabajo a sus trabajadores y permite que trabajen con mayor calidad.

Garantizar la mejor calidad posible en todos los productos es la finalidad máxima de Concentrol, pero tenemos claro que esto solo es posible cuando el trabajo interno del día a día funciona correctamente. En este sentido, estamos en constante revisión de todos los procesos que se realizan, desde la idea del producto hasta su comercialización.