Los antiespumantes son productos clave en muchos procesos industriales. Su uso permite aumentar la capacidad productiva y la calidad de los productos finales. El control y la reducción del nivel de espuma mejora el rendimiento de los procesos productivos ya que permite la utilización de los recipientes al máximo de su capacidad, evitando desbordamientos y facilitando el bombeo.

En el caso de la industria alimentaria, es habitual utilizar antiespumantes basados en emulsiones de silicona de tipo polidimetilsiloxano (código alimentario E-900), que ofrecen excelentes resultados en dosificaciones bajas, una elevada persistencia del efecto antiespumante y una alta fiabilidad en su eficacia. En Concentrol disponemos de soluciones basadas en silicona que cumplen con todas las garantías de calidad y seguridad alimentarias, así como de antiespumantes basados en aceites vegetales y aditivos alimentarios (con código E) para aquellos casos en los que no se pueda utilizar un antiespumante basado en siliconas.

Referente a los antiespumantes poliméricos (químicamente se trata de polímeros de tipo poliol, compuestos por óxido de etileno y óxido de propileno polimerizados), desde Concentrol no se recomienda su uso en aquellas aplicaciones donde puedan llegar a formar parte del alimento final. En estos casos, debido a que no tienen código alimentario E, su uso no es aconsejado y se debería limitar a su función de coadyuvante alimentario de proceso, y no como aditivo alimentario. Los agentes antiespumantes poliméricos de Concentrol cumplen con los requisitos para ser utilizados como coadyuvantes tecnológicos, en concreto con las reglamentaciones francesa y americana: Arrêté du 26 septembre 2017 modifiant l’arrêté du 19 octobre 2006 relatif à l’emploi d’auxiliaires technologiques dans la fabrication de certaines denrées alimentaires y Title 21 CFR (FDA): 173.340, 172.808, 173.310. Considerados únicamente como soportes del proceso, deben de ser retirados del alimento final.

Desde Concentrol recomendamos la utilización en alimentación de los antiespumantes basados en siliconas (referencias EMULTROL DFM DV-X FG) por sus múltiples ventajas:

> Fácil disolución en sistemas acuosos

> No afecta a las propiedades organolépticas de los alimentos

> Efectivo en dosis bajas: 0,01 al 0,1% (dependiendo del tipo de espuma)

> Cumple con la normativa europea de aditivos alimentarios Reglamento (CE) Nº 1333/2008

> Certificado como aditivo E-900 en la industria alimentaria

La gran efectividad de los antiespumantes basados en silicona y sus garantías de seguridad alimentaria los convierten en la mejor opción para el uso en aplicaciones donde haya un contacto con alimentos.

En el caso que no se puedan utilizar siliconas, la mejor alternativa son los antiespumantes formulados a partir de aceites vegetales y aditivos alimentarios como es el caso del producto EMULTROL DFM OLV-55 FG. Esta referencia dispone de un campo de aplicación más amplio que el de los antiespumantes basados en siliconas, siendo adecuada para el procesado de productos lácteos, bebidas, frutas, hortalizas, sopas y derivados cárnicos, entre otros. Por otra parte, la particular combinación de sus componentes mejora el efecto antiespumante a largo plazo respecto a otros productos del mercado. Todo ello considerando que se trata de un producto basado en aceite vegetal apto para el contacto directo con alimentos.

La responsabilidad con la seguridad de las personas y con el medio ambiente son totalmente prioritarios para Concentrol. En caso de tener dudas sobre los antiespumantes más indicados para vuestra producción no dudéis en contactar con nosotros.